Explorar la relación entre la pérdida de audición y la demencia
Los investigadores encuentran cada vez más pruebas de la relación entre la pérdida de audición y la demencia, según un nuevo estudio. ¿Qué sabemos de esta relación y cómo afecta a las personas con pérdida de audición?
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Un nuevo informe científico apoya la probabilidad de que la pérdida de audición esté relacionada con el deterioro cognitivo, incluida la demencia. Estas conclusiones de la prestigiosa investigadora Bridget Shield plantean preguntas sobre cómo puede afectar esta conexión a las personas con pérdida de audición y a sus seres queridos.
Antes de empezar a explorar la relación entre la pérdida de audición y la demencia, tenemos que entender exactamente cuál es esa relación.
¿Qué es la demencia?
La demencia es un término amplio que se utiliza para englobar la pérdida de cualquier función cognitiva. Estas pueden variar dependiendo de la persona; para algunos, la memoria y el habla pueden verse afectados, mientras que otros pueden tener problemas con la resolución de problemas y la autogestión. Aunque la demencia afecta sobre todo a las personas mayores, puede empezar a manifestarse en la edad adulta.
Existen distintos tipos de demencia, aunque la enfermedad de Alzheimer es la más prevalente. Algunas personas incluso padecen varios tipos de demencia a la vez. La demencia suele ser irreversible, aunque se pueden hacer esfuerzos para ralentizar el avance de la enfermedad.
Se han realizado estudios masivos para determinar las causas y los efectos de la demencia en sus diversas formas, pero, como ocurre con la mayoría de las enfermedades, se hacen nuevos descubrimientos constantemente. El cerebro humano es inmensamente complicado, y es difícil hacer afirmaciones definitivas.
Sin embargo, muchos estudios han empezado a centrarse en los posibles factores que contribuyen a la demencia y en cómo pueden afectarla otras afecciones. Una de ellas es la pérdida de audición.
¿Cuál es la relación entre la pérdida de audición y la demencia?
En un estudio francés, se realizó un seguimiento a 3.800 personas durante 25 años. El estudio registró que los ancianos con pérdida de audición no tratada corrían un mayor riesgo de desarrollar demencia a medida que envejecían.* Dado que casi dos tercios de los ancianos estadounidenses tienen pérdida de audición diagnosticada, esta información golpeó con fuerza.
La pérdida de audición es un problema frecuente entre las personas mayores, por lo que enterarse de que contribuye a otra enfermedad puede hacer que la gente se preocupe por la salud de sus seres queridos. Sin embargo, tener pérdida de audición no significa que alguien tenga garantizado el desarrollo de demencia. El mismo estudio también descubrió que las personas con problemas de audición que utilizaban audífonos estaban mejor protegidas contra el deterioro cognitivo rápido.
Aunque se puede decir mucho sobre la importancia de los audífonos, este estudio reveló que eran una herramienta valiosa para reducir el riesgo de demencia entre las personas con pérdida de audición.
¿Por qué afecta la pérdida de audición a la demencia?
Como se ha mencionado anteriormente, el mero hecho de tener una pérdida auditiva no determina si alguien sufrirá un deterioro neurológico. En su lugar, tenemos que hablar de los efectos de la pérdida de audición y el deterioro cognitivo, y de cómo estos contribuyen individualmente. La pérdida de audición puede afectar gravemente al cerebro y a la salud mental, lo que a su vez puede contribuir a la demencia.
Existen tres razones principales por las que la pérdida de audición puede provocar demencia. Algunos o todos estos factores contribuyen a que una persona con problemas de audición pueda desarrollar Alzheimer u otra forma de demencia más adelante en su vida.
Carga cognitiva. La idea básica de la carga cognitiva es que la pérdida de un sentido contribuye al estrés neurológico. Como el cerebro se esfuerza por comprender lo que ocurre a su alrededor, se sobrecarga de trabajo y resta recursos a otras funciones, como la memoria. Tras años de desuso, estas áreas del cerebro empiezan a declinar.
Reestructuración neurológica. El cerebro es un órgano muy adaptable. Cuando se encuentra con problemas, se modifica para resolverlos. Por ejemplo, cuando alguien empieza a perder un sentido, el cerebro se reorganiza. La parte que se encarga de la audición disminuye y el cerebro empieza a extraer recursos de otras áreas. Al igual que ocurre con la carga cognitiva, esto aumenta el riesgo de demencia.
Aislamiento social. Cuando las personas carecen de audición, tienen problemas para comunicarse. Aunque aprendan el lenguaje de signos, pueden tener dificultades para comunicarse con quienes no lo conozcan.
Puede que no siempre haya intérpretes presentes, y el deterioro de las habilidades motoras puede dificultar la escritura y el lenguaje de signos. Esta falta de comunicación puede hacer que disminuyan las capacidades lingüísticas y de memoria, y provocar otros problemas de salud mental como la depresión. Los estudios demuestran que la depresión también afecta negativamente al cerebro, aumentando el riesgo de demencia.
Las conclusiones de Bridget Shield
El nuevo y exhaustivo informe científico de Bridget Shield titulado «Pérdida de audición: cifras y costes» proporciona una valiosa información sobre cuánto cuesta la pérdida de audición no tratada. Este «coste» es una medida monetaria de cuánto se ven afectadas la calidad de vida y la productividad. Según el informe, la pérdida de audición discapacitante no tratada cuesta a la Unión Europea 185 mil millones de euros al año. En el Reino Unido, por ejemplo, sólo 1 de cada 3 personas con pérdida de audición discapacitante utiliza audífonos.
En muchos casos, las pérdidas de audición no tratadas pueden agravarse y convertirse en casos más graves. Para ahorrar dinero y preservar la calidad de vida de las personas, es necesario tomar medidas para ayudarles a obtener los audífonos que necesitan. Si las personas reciben tratamiento para sus afecciones auditivas, tienen menos probabilidades de desarrollar demencia y pueden disfrutar de una vida más sana.
Las últimas investigaciones sugieren que el uso de audífonos reduce la tasa de deterioro cognitivo, según el informe. Y añade: «Es probable que los usuarios de audífonos sean más felices, más sanos y más ricos, con una mejor calidad de vida en general, que las personas con discapacidad auditiva que no utilizan audífonos «**.
Cómo pueden ayudar los audífonos
Como ya se ha mencionado, las personas que utilizan audífonos corren menos riesgo de desarrollar demencia. Suelen ser más sociables y sus cerebros están mejor estimulados. Se les puede animar a participar en interacciones sociales, salir al aire libre y disfrutar de actividades de resolución de problemas.
Todas estas cosas ayudan a prevenir la demencia a su manera. Hablar con alguien y participar en diferentes actividades puede parecer sencillo, pero tiene un gran impacto. Fomentan la resolución de problemas y la estimulación neurológica y permiten a las personas crear recuerdos. Cuando alguien se encuentra socialmente aislado y no experimenta la oportunidad de estimular su cerebro con recuerdos, las funciones cognitivas del cerebro pueden declinar.
Los audífonos permiten a las personas con pérdida de audición, especialmente a los mayores, una mayor independencia y autonomía. Cuando pueden oír con claridad, es más probable que participen en actividades que estimulen su cerebro. Incluso cosas tan sencillas como las conversaciones, las actividades de ocio y salir al aire libre son importantes para su salud general.
Sin embargo, no todo el mundo está abierto a la idea de los audífonos, lo que supone un problema. En estos casos, el diseño de los audífonos y las influencias positivas pueden animarles a aceptar la ayuda.
Opciones alternativas a los audífonos tradicionales
Muchas personas se oponen a los audífonos, sobre todo a los más tradicionales. Los diseños toscos, la falta de funcionalidad y otros factores pueden hacer de los audífonos una idea poco atractiva.
Styletto X de Signia desafía estos prejuicios negativos contra los audífonos. Con total conectividad, estos nuevos dispositivos ofrecen la posibilidad de transmitir audio y llamadas telefónicas directamente a los audífonos. Combinado con un diseño ultrafino único y la posibilidad de recarga portátil, ofrecen mucho más que los audífonos tradicionales.
Para aquellos que se sienten ambivalentes o negativos respecto a los audífonos, Styletto X podría ser el desarrollo que estaban esperando.
* Shield, B. (2018). Evaluation of the social and economic costs of hearing impairment. A report for Hear-It AISBL.
** Shield, B. (2018). Evaluation of the social and economic costs of hearing impairment. A report for Hear-It AISBL.